Clínica del dolor: ¿Qué es y para qué funciona?
Una de las peores cosas que nos pueden suceder es sentir dolor. Aunque se trate de un signo de alarma que nos manda el organismo para avisar de que algo no funciona bien, en ocasiones se vuelve tan insoportable que nos resta por completo la calidad de vida. Cuando el dolor se convierte en algo crónico, las personas pueden ver mermada su vida normal de forma muy importante y buscar la solución en una clínica del dolor.
Qué es una clínica del dolor
Un clínica del dolor es una unidad médica especializada en el tratamiento del dolor. A este tipo de clínicas, las personas llegan ya con un diagnóstico por parte de los diferentes especialistas, cuando los tratamientos convencionales no han surtido efecto para paliar las molestias del paciente.
El objetivo de una clínica del dolor es tratar el sufrimiento y aliviarlo o acabar con él. Las unidades clínicas para el tratamiento del dolor suelen acoger pacientes de edades avanzadas o con enfermedades crónicas.
La Seguridad Social cuenta con unidades para el tratamiento del dolor, sin embargo, los tiempos de espera son tan largos que la persona debe soportar mucho tiempo de sufrimiento antes de poder acceder a ellas.
En Vital Seguro incluimos la clínica del dolor dentro de nuestras pólizas de salud. Además de tener acceso directo a especialistas para obtener un rápido diagnóstico, el acceso a nuestras unidades del dolor no tiene las eternas listas de espera de la Seguridad Social.
Qué patologías se tratan en una clínica del dolor
Aunque resulte obvio decirlo, en la clínica del dolor se tratan aquellas patologías que producen dolor. No se atiende a pacientes que sufren un dolor puntual por una enfermedad determinada, pero que tiene tratamiento y cura. A este tipo de unidades acuden personas con trastornos crónicos o incurables y que les producen un dolor incapacitante.
Es muy habitual que a la clínica del dolor acudan pacientes con los siguientes problemas:
- Dolores articulares.
- Dolores neuropáticos.
- Artrosis.
- Fibromialgia.
- Dolores musculoesqueléticos.
- Neuropatías periféricas.
- Dolor después de padecer un herpes.
- Síndrome del miembro fantasma tras una amputación.
- Migrañas.
- Neuralgia del trigémino.
- Dolor de columna: dorsal, cervical, lumbar o sacro.
Técnicas utilizadas para tratar el dolor
En esta rama médica se utilizan diferentes métodos, dependiendo de la patología que tenga la persona y del tipo del dolor.
Pueden plantearse diferentes rutinas de tratamiento, que incluyan fármacos, rehabilitación, cirugía, bloqueo en determinados nervios para evitar el dolor, infiltraciones o técnicas de anestesia regional.
Así mismo, la clínica del dolor cuenta también con fisioterapeutas y con psicólogos para aportar una ayuda emocional a la persona que está sufriendo dolor. Es frecuente que un dolor intenso sufrido de forma crónica termine por producir también problemas mentales, como ansiedad o depresión. A su vez, se trata de un círculo vicioso, ya que a mayor ansiedad, suele aparecer más dolor.
Vital Seguro y la clínica del dolor
Con nuestro seguro médico, podrás acceder a este servicio con la derivación de cualquier especialista de nuestra mutua que lo considere necesario.
Las visitas a la clínica del dolor tendrán la frecuencia que los especialistas consideren. Sin embargo, si durante los periodos de espera, se vuelve a sufrir de forma importante, se puede llamar a la propia clínica para comentarlo y adelantar la cita.
Si quieres saber más sobre nuestro seguro médico y el acceso a la clínica del dolor, ponte en contacto con nosotros.