Plagiocefalia: Deformidad del cráneo neonatal

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Plagiocefalia: Deformidad del cráneo neonatal

La plagiocefalia, un término que proviene del griego “plagios” (oblicuo) y “cephale” (cabeza), es una condición que afecta la forma del cráneo, específicamente caracterizada por una deformación aplanada o asimétrica en la cabeza de un bebé, cuando aún se está formando y es blanda. Esta anomalía, aunque no es rara, ha ganado atención en los últimos años debido a su relación con ciertos hábitos y prácticas en la vida cotidiana.

Desde Vital Seguro explicaremos las causas, síntomas, consecuencias, diagnóstico, tratamiento y medidas preventivas asociadas con ella.

Causas de la plagiocefalia

Puede tener diversas causas, siendo la posición del bebé al dormir una de las más destacadas. La recomendación de colocar a los bebés boca arriba para prevenir el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) ha llevado a un aumento en los casos, ya que los bebés pasan más tiempo en esta posición.

Otras causas incluyen el parto prematuro, músculos del cuello apretados o débiles, y las llamadas “cabezas planas posicionales” que resultan de pasar mucho tiempo en una posición particular, como en los carritos de paseo.

Síntomas y consecuencias de la plagiocefalia

Los síntomas son evidentes visualmente, con una cabeza que parece aplanada en un lado, o por detrás. Además, puede notarse asimetría facial y desplazamiento de las orejas. Aunque no suele causar problemas neurológicos, puede afectar la apariencia física y el desarrollo de los músculos faciales.

Las consecuencias a largo plazo pueden incluir la persistencia de asimetrías faciales, posiblemente afectando la autoestima del niño a medida que crece.

También se ha discutido el impacto en el desarrollo de habilidades motoras y cognitivas, aunque la evidencia es menos concluyente en este aspecto.

Diagnóstico y tratamiento de la plagiocefalia

El diagnóstico se realiza mediante una evaluación visual del cráneo del bebé. En algunos casos, se pueden utilizar imágenes por resonancia magnética (IRM) o tomografías computarizadas (TC) para obtener una visión más detallada de la forma del cráneo y descartar otras posibles causas.

El tratamiento, por su parte, depende de la gravedad de la condición. En casos leves, cambios en la posición del bebé durante el sueño y sesiones de fisioterapia para fortalecer los músculos del cuello pueden ser suficientes.

Para casos más severos, se pueden considerar dispositivos especiales para redirigir el crecimiento del cráneo o, en casos excepcionales, cirugía reconstructiva.

Prevención de la plagiocefalia

La prevención es clave, y algunos consejos pueden ayudar a reducir el riesgo. Alternar la posición del bebé durante el sueño, fomentar el tiempo boca abajo durante las horas de vigilia para fortalecer los músculos del cuello, y limitar el tiempo que el bebé pasa en dispositivos que ejercen presión en la cabeza, son prácticas recomendadas.

La conciencia y la educación de los padres sobre estas estrategias preventivas son esenciales para reducir su incidencia.

En conclusión, la plagiocefalia es una condición que afecta la forma del cráneo en los bebés y puede tener diversas causas, desde la posición al dormir hasta factores genéticos. Si bien la mayoría de los casos no tienen consecuencias graves, el diagnóstico temprano y las estrategias de tratamiento adecuadas son fundamentales para abordar la condición de manera efectiva. La prevención desempeña un papel crucial, y los padres deben estar informados sobre las prácticas que pueden ayudar a reducir su riesgo y promover el desarrollo saludable de sus hijos.

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